Presentación
La pandemia de COVID-19 está representando un reto para la ciudadanía, para las personas que enferman y el conjunto de profesionales de las instituciones sanitarias, particularmente los profesionales sanitarios implicados en la atención directa a pacientes COVID-19.
En la primera ola ya se comprobó que la sobrecarga emocional y física era excesiva conforme la incidencia de COVID-19 y su letalidad se incrementaban. La escasez de recursos y equipamientos, unido el creciente número de profesionales que resultaron infectados (o que incluso fallecieron a causa de la COVID-19) y la incertidumbre por el constante cambio de instrucciones nos llevaron a considerar a los profesionales sanitarios Segundas Víctimas del SARS-CoV-2.
El porqué de esta web
La pandemia por SARS-CoV-2 (COVID-19) está generando una elevada presión asistencial y ha obligado a tomar decisiones críticas en un ambiente de alarma social. La labor asistencial se ha realizado bajo condiciones adversas que han ocasionado reacciones de estrés agudo y otras patologías afectivas o reacciones psicosomáticas en el personal sanitario.
Las sucesivas olas de esta pandemia ha impedido la recuperación del conjunto del sistema de salud y de sus profesionales. Las reacciones adaptativas que se observaron en la primera ola han dado a otras reacciones afectivas asociadas a la fatiga, desmotivación y, finalmente “burnout”.
Nuestro propósito, desde principios de marzo de 2020, es colaborar para contrarrestar el devastador efecto entre los profesionales sanitarios y entre quienes están apoyando su labor, tiene la COVID-19. Sin profesionales que se sientan respaldados y con fuerza moral la asistencia estará todavía más comprometida.
Por qué hablamos de segundas víctimas del SARS-CoV-2
Al igual que en muchos otros países, la pandemia por SARS-CoV-2 en España ha requerido del sistema sanitario una respuesta para la que no estaba preparado. En consecuencia, el escenario asistencial ha pasado, de forma abrupta, de un estado de cierto equilibrio a otro caracterizado por una presión asistencial extrema, toma de decisiones en situaciones de conflicto ético y en ausencia de protocolos y guías, movilizar recursos humanos no suficientemente entrenados. A esto se le ha sumado, prestar la atención con carencias significativas en materiales y equipos. Ofrecer los niveles de calidad y seguridad en la atención habituales no ha sido posible en todos los casos.El inevitable impacto de esta situación sin precedentes sobre los profesionales sanitarios, y otro personal de apoyo a la labor sanitaria, se ha traducido en reacciones de estrés agudo, alteraciones afectivas y psicosomáticas de intensidad y duración variables.
El término “segunda víctima” aplicado al personal sanitario ha sido utilizado en las últimas dos décadas para hacer referencia al malestar emocional que llegan a experimentar los profesionales sanitarios al cuestionarse su participación en un incidente de seguridad que ha provocado un daño al paciente o bien cuando observa que el paciente a su cargo no evoluciona adecuadamente y se cuestiona sus decisiones y actuaciones.
En el escenario actual, donde el profesional sanitario no ha contado con los medios apropiados para cuidar y curar a los pacientes, recurrimos al concepto de segunda víctima para hacer referencia a “todo profesional sanitario, o de apoyo, implicado en la atención a personas afectadas por COVID-19, que presenta respuestas de estrés agudo al verse sometido de manera continua a una situación extrema provocada por la combinación de una serie de factores críticos, entre los que se encuentran la alarma social, la sobresaturación de los servicios, la escasez de recursos y la evolución tórpida de los pacientes a su cargo”.
El malestar emocional de los profesionales, con independencia de su origen, supone un riesgo que afecta directamente a la seguridad de los pacientes y a la calidad de la atención sanitaria que estos reciben.
Metodología de trabajo
Este proyecto ha sido desarrollado mediante una metodología acción-reacción debido a la apremiante necesidad de contar con recursos de apoyo al personal sanitario y de soporte a la labor asistencial como consecuencia del rápido estallido e impacto de la crisis sanitaria ocasionada por la pandemia del SARS-CoV-2.
La metodología de estudio se ha desarrollado de la siguiente manera (ver el esquema gráfico de la Figura 1):
- Primero, identificamos, en colaboración con los profesionales de centros sanitarios, los problemas y barreras a los que se enfrentan, en los diferentes momentos de la pandemia, el personal sanitario y de apoyo a la laboral asistencial y su impacto sobre su bienestar y rendimiento.
- Segundo, ideamos recursos de apoyo para afrontar los problemas previamente identificados mediante la aplicación de técnicas de consenso en las que participan expertos de diferentes ámbitos y perfiles profesionales y la revisión de la literatura disponible sobre actuaciones que se están llevando a cabo en otros lugares para mitigar el impacto de la COVID-19 o que se implantaron ante otras crisis pasadas con un impacto similar al del SARS-CoV-2.
- Tercero, la intervención o el recurso desarrollado se traslada a los centros sanitarios de manera simultánea.
- Cuarto, a partir del cruce del retorno de dichos recursos, se incorporan modificaciones y mejoras y, posteriormente, se generaliza el recurso disponible en la página web.
Figura 1. Metodología empleada en el proyecto Segundas Víctimas de la COVID-19
Esquema general de recursos
Las situaciones problemas y los recursos que presentamos pueden ser, extensibles, a otros sistemas sanitarios de otros países que, lamentablemente, también comparten esta terrible pandemia.
Puedes consultar este esquema general de situaciones problema indentificadas, necesidades generadas y recursos disponibles para una adecuada respuesta en el siguiente archivo pdf:
Cuéntanos tu experiencia
Accede a este formulario y cuéntanos tu experiencia.Literatura Científica
Para ver y descargar la literatura científica, por favor accede a la siguiente página.